Si ya de por si los pies necesitan que se les brinde un cuidado continuo, las personas que padecen de diabetes deben prestar mucha más atención, haciéndose necesario tener una buena rutina de cuidado de los pies, sobre todo en la época de verano.
Padecer diabetes conlleva la pérdida de sensibilidad en los pies. A lo que se une que durante los meses de verano se llevan los pies más descubiertos. Esto los sitúa como un gran factor de riesgo de sufrir algún tipo de dolencia.
Gracias a la difusión y atención que desde hace un tiempo se le presta a la diabetes, esta enfermedad ha dejado de ser tan silenciosa. Pero es cierto, que en ocasiones puede pasar desapercibida por la falta de síntomas, lo que aumenta las complicaciones del paciente.
Es vital que se extreme la prevención de la aparición del pie diabético, sobre todo en los meses de verano. Veamos algunas recomendaciones para mejorar su cuidado y prevención:
– No abuses del azúcar, como siempre: algo obvio pero que en una época de descuidos en la dieta hay que recordar.
– Revisa el estado de los pies dos veces al día: como mínimo, ya que de esta manera podrás darte cuenta de la aparición de pequeñas heridas o infecciones que por la falta de sensibilidad no hayas detectado.
– Hidrata los pies de forma habitual: debido a la diabetes, son personas mucho más propensas a sufrir infecciones o grietas. No sólo es necesario hidratar el cuerpo con líquidos, busca las cremas que mejor se adapten a las necesidades de los pies.
– Utiliza calzado con buena suela: de esta manera podrás proteger la piel del pie de sufrir el calor que desprende el suelo, provocarle cortes o golpes con algún objeto.
