Hablar de peeling es hacerlo de una técnica para exfoliar el rostro y que que pretende eliminar marcas, manchas o arrugas pequeñas. La finalidad de este tratamiento es la de dejar una piel más hidratada, iluminada y suave, con un aspecto mucho más joven y radiante. Pero ¿sabes qué es y en qué consiste un peeling?
Peeling: qué y para qué
El peeling es un proceso estético que intenta exfoliar o descamar la piel. Para ello se aplica una sustancia que consigue arrancar las células muertas, permitiendo así que las capas más superficiales de la dermis se renueven y mejoren considerablemente su apariencia.
El peeling ayuda a eliminar las posibles manchas que hayan aparecido a causa del sol, acné o las manchas en la piel que suelen provocar los desequilibrios hormonales. También es muy eficaz contra las arrugas, mejorando el tono y la textura de la piel, dándole un nuevo toque de luminosidad.
Estimula la creación de colágeno, consiguiendo activar la circulación de la piel y mejorando la absorción de otros productos beneficiosos para la piel. El peeling también puede ser útil para reducir los poros de la piel de la cara.
Tipos de peeling
Estos se podrían clasificar según el nivel de profundidad al que este consiga llegar. Por tanto, podríamos hablar de superficial, medio o profundo. Pero también se pueden clasificar dependiendo de la técnica que se use:
– Peeling físico: aplicar un agente físico para conseguir disminuir la capa más superficial de la piel.
– Peeling químico: aplicando productos químicos, habitualmente ácidos.
– Peeling mecánico: se utilizan cepillos, lijas o rodillos con micropartículas de elementos como cristales o piedra. Uno de estos peeling más conocidos es el de dermoabrasión.
Sesiones y resultados
El número de sesiones que se necesitan dependerá del tipo de patología que se quiera tratar. Por regle general, se aconseja dejar al menos una semana entre cada sesión, y tienen una duración de unos 30 minutos.
Durante los primeros días notará que la piel está un poco enrojecida y con los días se irá escamando un poco, dejando paso a una nueva piel, con manchas ni marcas, con mucha más luz.
